Planes de ahorro previos para mejorar tu jubilación: elige el mejor
Madrid, 12 de diciembre. Toca pensar en los nuevos propósitos del año y, estés o no cerca de jubilarte, es momento también de pensar en los ingresos que percibirás una vez dejes de trabajar, es decir, de pensar en tu futura pensión. ¿Has ahorrado lo suficiente? ¿Cómo puedes complementar tu pensión? ¿Deberías invertir en algo? ¿Es buena opción hacerme un plan de pensiones? ¿Qué condiciones debo acatar?
Lo cierto es que existen diferentes opciones, según tu edad, capacidad que tengas de ahorro y el riesgo que quieras asumir.
Cómo complementar la pensión
Tal vez hayas oído hablar de los llamados Planes de Pensiones Individuales (PPI), ya que son la opción más clásica o tradicional para complementar la pensión pública.
Se trata de un producto de ahorro a largo plazo diseñado para acumular capital. ¿Cómo? A través de aportaciones periódicas flexibles (cuantía y periodicidad) o extraordinarias (normalmente a final de año). En el caso de los PPI, la rentabilidad no está garantizada y el motivo no es otro que el hecho de que depende de su política de inversiones y de la evolución de los activos financieros en la cartera del fondo de pensiones.
A pesar de tener detractores y defensores, en España se comercializan más de 1.000 planes de pensiones del sistema individual, con un patrimonio superior a 77.000 millones de euros y el 85% del patrimonio en manos de los bancos, lo cual no siempre es lo más rentable para el partícipe. Es muy fácil identificar los planes, ya que están clasificados por agencias independientes de 0 a 5 estrellas, lo que permite a una persona no profesional hacerse una idea de si su plan es bueno o mejorable.
Aun así, desde Asegura Consultoría aconsejamos que sea un profesional independiente el que indique las mejores opciones para un plan de pensiones, que no olvidemos será un complemento a una pensión pública a la baja irremediablemente.
Otra de las opciones a barajar son los denominados Planes de Previsión Asegurados (PPA). Consiste en seguros de ahorro-previsión a largo plazo que tienen unas condiciones jurídicas y fiscales similares a los PPI.
Estos productos son aconsejables para aquellas personas cuya edad está cercana a la jubilación y quieren proteger el patrimonio acumulado en los planes de pensiones o, simplemente, no quieren asumir los riesgos que implican los mercados de capitales.
La rentabilidad de estos productos en un entorno de tipos cero ha bajado mucho, pero todavía es posible encontrar algún producto que al menos nos proteja de la inflación.
Planes de ahorro a largo plazo
Otra opción son los denominados Planes de Ahorro. Estos productos surgieron a raíz de la última reforma fiscal y se materializan en depósitos (CIALP) o seguros de vida (SIALP) que permiten hacer aportaciones máximas de 5.000 euros al año durante un periodo de, al menos, cinco años (por este motivo se le bautizó con el sobrenombre de Plan de Ahorro 5). Lo que hace es ofrece al inversor una garantía mínima del 85% de las aportaciones cuando vencen esos cinco años de inversión y permite que los rendimientos generados estén exentos en el IRPF. Eso sí, repetimos, siempre y cuando hayan transcurrido al menos cinco años desde la contratación o pago de la primera prima.
Es una magnífica alternativa de ahorro para inversores conservadores que quieren ahorrar a medio o largo plazo sin asumir riesgos y con ventajas fiscales al vencimiento.
PIAS, Unit-Linked, rentas y fondos
Otra opción a largo plazo es optar por un PIAS, siglas que corresponden al Plan Individual de Ahorro Sistemático, que serían un híbrido entre un seguro de vida y un plan de pensiones, que garantizan una forma de renta vitalicia en el momento de la jubilación que complemente la pensión pública. ¿Qué significa esto? Que llegada una fecha determinada, el asegurado recibe el capital acumulado en forma de renta vitalicia hasta que fallezca.
Pero, si hay algo que debas conocer de este tipo de planes es que las primas periódicas están limitadas a 8.000 euros al año (hasta un total de 240.000 euros) y que su rescate provoca que pierdas beneficio fiscal, además de que el dinero ahorrado se percibe en un único pago y no como renta vitalicia. Eso sí, ten en cuenta también que recibes el capital en forma de renta vitalicia y todos los beneficios acumulados estarán exentos de tributación.
Renta vitalicia
Dentro de los productos de ahorro también está la posibilidad de optar por una Renta Vitalicia, una modalidad de seguros que garantiza que recibas una renta periódica hasta tu fallecimiento. Las rentas se pueden acumular de forma inmediata (se perciben después de contratar el producto y suele formarse a través de una prima única) o de manera diferida, esto es, que transcurre un período de acumulación desde la contratación del seguro hasta que se empieza a percibir la renta.
Además, gozan de una serie de ventajas fiscales en función de la edad en la que comenzamos a percibir la renta y pueden llegar atributar tan solo por el 1,4%.
Las rentas temporales tienen las ventajas fiscales en base al número de años de duración de la renta. Para personas mayores de 65 años son muy interesantes a la hora de vender acciones, fondos de inversión, inmuebles u otros activos financieros, ya que, si se reinvierte el importe de esta venta en una renta vitalicia la plusvalía estará exenta del pago de impuestos.
Fondo de seguro diversificado (Unit Linked)
Tal vez hayas oído hablar de los ‘Unit Linked’ (en español, fondo de seguro diversificado). Se trata de productos financieros que permiten canalizar un ahorro en el futuro. Es decir, son una forma de invertir teniendo a la vez un seguro de vida y un fondo de ahorro. En resumen, es una inversión en una cesta de fondos, acciones o bonos y que se estructura en torno a un seguro de vida. Así, una parte de la inversión debe destinarse al pago de la prima del seguro, pero, en cambio, la mayoría del capital se invierte en una cartera de productos y el riesgo lo asume el comprador, que es el que elige los activos en los que invertir y los riesgos a correr. Es decir, el cliente decide todo: distribuye el capital que aporta entre todas las alternativas de inversión que le ofrecen, puede movilizar el capital entre las cestas o fondos que pertenecen al ‘unit linked’ desde el momento en el que contrata el producto.
Estos productos son una muy buena alternativa para canalizar aportaciones regulares o para aquellas cantidades que no necesitamos y de las que queremos obtener una rentabilidad en el medio y largo plazo. Existen muchas alternativas en el mercado actualmente, con la ventaja de poder decidir la mejor alternativa (siempre asesorado por un profesional independiente).
Fondos de inversión
Terminamos el artículo con otro clásico: los conocidos Fondos de Inversión, a través de los cuales el cliente participa en una cartera de diversos activos y que administran gestores profesionales (sociedad gestora). Las participaciones están distribuidas en forma proporcional a los aportes de los inversores. Y el número de participaciones de los fondos no está limitado, sino que aumenta o disminuye en función de las suscripciones y reembolsos.
Tal y como has podido leer, son muchas las opciones que existen a la hora de ahorrar para tu jubilación. Pero, como siempre decimos desde Asegura Consultoría, lo mejor es hacerlo con la ayuda de expertos, ya que conocen bien cuáles son las mejores opciones en función de tus necesidades.
En Asegura Consultoría aseguramos tu futuro.
Luis Manuel Martín Olivares. Dpto. Asegura Consultoría de CofmS31